El ataque registrado la semana pasada donde un delincuente baleó a corta distancia al chofer de una combi en el municipio de Tlalnepantla, Estado de México, es solo uno de los 10 robos con uso de la fuerza que se registran cada día en los 13 municipios que hacen frontera con la Ciudad de México.

La inseguridad que impera en los municipios del Estado de México colindantes con la capital del país ha permitido que los robos con violencia en transporte público se incrementaran 55 por ciento en lo que va del presente año y que al menos tres personas hayan muerto tras ser despojadas de sus pertenencias.

Las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) delinean perfectamente la problemática que se vive en estas demarcaciones, pues tan solo en nueve meses se han cometido 2 mil 836 asaltos con uso de la fuerza, dicha cifra representa el 42.2 por ciento de los delitos registrados en el país.

Tan solo en octubre se registraron dos asaltos que acapararon la opinión pública por el uso desmedido de la violencia por parte de los delincuentes. El primero de ellos fue el asesinato del periodista Daniel Hernández Moncada de 24 años, durante un asalto en Ecatepec de Morelos.

El 4 de octubre Hernández regresaba a su casa después de terminar su horario de trabajo en la Dirección de Comunicación Social del Ayuntamiento del mismo municipio. Mientras circulaba en la Avenida Carlos Hank González, entre las estaciones del Metro Ecatepec y Olímpica de la Línea B, la combi fue asaltada por dos hombres que venían a bordo.

La organización México Evalúa ha señalado en distintas ocasiones que los robos en transporte público y a transeúnte en vía pública son los que registran mayores niveles de impunidad, ya que 99 por ciento de estos delitos no llegan a ser investigados.

A pesar de lo anterior, existen algunas historias donde los criminales han sido capturados por los cuerpos policiacos. Uno de esos casos fue el que se dio el pasado 12 de agosto cuando una combi fue asaltada por dos hombres en Ecatepec. Uno de los criminales cortó cartucho del arma y dijo a los pasajeros “ya se la saben mi gente, a ver mi chofer vete más lento por favor”. En acto seguido el cómplice comenzó a despojar de sus pertenencias a las personas y a los pocos metros se bajan de la unidad para huir.