Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos aseguran que trabajadores de la salud pueden llevar una misma mascarilla N95 hasta cinco veces. Sin embargo, expertos señalan que depende la frecuencia con la que una persona la use depende la cantidad de veces que pueda usarla.

Por ejemplo, usar el mismo cubrebocas para ir al supermercado, no es lo mismo que hacerlo durante toda una jornada laboral.

Richard Flagan, que estudia las mascarillas y los aerosoles en el Instituto de Tecnología de California, dice que la cantidad de tiempo que se lleva puesto un cubrebocas es más importante que la frecuencia con la que se usa.

Flagan recomienda limitar el uso de una N95 a solo dos o tres días, ya que cada vez que se respira dentro de estas mascarillas, las partículas se acumulan en ella, lo cuál podría dificultar la respiración si ha atrapado ya muchas partículas.

El experto agregó que la banda elástica puede desgastarse y no ajustarse bien al rostro, o podría ensuciarse o mojarse, especialmente si se usa mientras se hace ejercicio.

Por lo que menciona que si hay alguno de estos cambios en el cubrebocas, es momento de dejar de usarlas, aunque solo haya sido por unas horas. Además ya que las N95 no pueden lavarse, deben tirarse una vez no sean aptas para su uso.

Con información de El Financiero