La ONU decidió proporcionar asistencia para la compra de alimentos a las poblaciones del norte de la franja de Gaza, precisó la entidad en un comunicado divulgado en Roma.

"Para las personas que han perdido o huido de sus hogares, una de las necesidades más urgentes en este momento es la comida. La forma más rápida y eficaz de ayudarles es proporcionándoles dinero, en forma de cupones electrónicos. Por el momento hay alimentos y las tiendas locales todavía están abiertas", explicó Samer AbdelJaber, representante del PMA para Palestina.

Sin embargo, el cierre de las entradas a la franja de Gaza pronto provocará escasez de productos básicos, incluido de alimentos, así como una preocupante subida de los precios.

"La gente de la franja de Gaza vive ya al límite y muchas familias luchan para tener un plato de comida en la mesa. La situación se ha deteriorado aún más por las restricciones por la pandemia de Covid-19", explicó Corinne Fleischer, representante del PMA para Oriente Medio y Norte de África.

"La mayoría de la población no aguanta más", agregó.

En la franja de Gaza, el PMA ayuda regularmente a unas 260 mil personas mediante transferencias de dinero efectivo o asistencia para adquirir alimentos, raciones alimentarias y proyectos de apoyo a los medios de subsistencia.

Más de dos tercios de los dos millones de habitantes de la franja de Gaza sufren inseguridad alimentaria desde antes de la semana negra causada por el enfrentamiento entre Israel y los islamitas de Hamas, los cuales siguen haciendo oídos sordos a los llamados internacionales para que cesen las hostilidades.

El 53% de la población de la franja de Gaza vive por debajo del umbral de la pobreza y el desempleo es de cerca el 45%.