Disminuyó la producción de automóviles en México debido a la escasez de semiconductores. La industria automotriz aún resiente el parón que sufrió durante abril y mayo de 2020. A casi dos años de este suceso, sigue encontrando dificultades para su recuperación debido a la pandemia de COVID-19.

Los semiconductores son materiales indispensables para la manufacturación de chips; estos son, a su vez, la base de los circuitos electrónicos de gran parte de los aparatos que usamos: desde refrigeradores hasta videojuegos. Estos materiales son escasos, y en pocos lugares del mundo hay industrias dedicadas a extraerlos y procesarlos para fabricar chips; gran parte de estas se ubican en el continente asiático, específicamente en China. En parte, la pandemia es responsable de que las rutas de comercio que movían el mercado de los chips se redujeran o paralizaran; sin embargo, otros factores, como la guerra comercial entre China y Estados Unidos, también agravaron la situación. Una de las muchas industrias que han resentido la escasez de semiconductores es la automotriz.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), sólo en México se redujo la producción automotriz en un 2%; se pasó de una producción de 3.04 millones en 2020 a 2.98 millones en 2021. La venta de vehículos, a nivel nacional, mostró un incremento del 6.8%: en 2020 se vendieron unos 950,000 vehículos ligeros, en 2021 poco más de un millón. Por otro lado, en este mismo rubro, las exportaciones subieron 0.94% durante el año pasado; pasó de 2.68 millones de unidades a 2.71 millones.

Durante diciembre de 2021, la producción, exportación y venta de vehículos presentó la caída más dura del año. Si se compara con el mismo periodo, pero de 2020, se encuentra que la producción de vehículos cayó un 16.51%; pasó de producir 254,000 unidades a unas 212.000. La exportación se redujo 17.31% y las ventas nacionales un 7.8%, pasaron de 105,603 en 2020 a 97.365 en 2021.